- Perseverance Tattoo
- Posts
- El secreto de la vida
El secreto de la vida
Y las ostias que te da
¿Quieres saber el secreto para conseguir lo que te dé la gana? Aquí va.
No te emociones demasiado, que no es ninguna fórmula mágica. No es un truco ninja, ni una técnica de esas que prometen que en 7 días tendrás el cuerpo de Thor o un negocio que facture millones. No, esto es simple. Tan simple que seguramente ya lo sabes, pero no lo haces.
El secreto es este: sigue el plan, no tus emociones.
Ya está. Eso es todo.
¿Te esperabas algo más? Pues lo siento, pero no. La vida es así, simple pero jodida. Porque aunque todos entendemos la idea, pocos tienen lo que hay que tener para aplicarla.
Piénsalo. ¿Cuántas veces has dicho: “Este año sí me pongo a tope con [inserta aquí tu objetivo épico]”? Y luego llega el lunes (porque todo empieza en lunes, claro) y estás ahí, motivadísimo. Pero cuando llega el martes, el ánimo empieza a flojear. Para el jueves, ya te estás diciendo: “Bueno, tampoco pasa nada si lo dejo hoy, total, lo retomo mañana.”
Y así pasa la semana. Y el mes. Y el año. Y de repente sigues donde estabas, pero con la excusa mucho más currada.
¿Por qué? Porque tu mente es tu peor enemiga. Tu cabeza es como ese amigo tóxico que te dice: “Venga, hoy no pasa nada, vamos a estar cómodos, total, lo mereces.” Pero no. Esa voz es la que te mantiene en el sofá mientras tus sueños van de paseo sin ti.
La verdad es que lo que importa no es cómo te sientes. Es lo que haces. Sigue el plan, aunque estés cansado, cabreado o te apetezca más ver Netflix.
¿Quieres un ejemplo? Los últimos tres días han sido un caos para mí. Lo último que quería hacer era sentarme a dibujar. Pero ¿qué hice? Pues me senté. Dibujé. Y punto. ¿Por qué? Porque sabía que mi objetivo no se iba a acercar mientras yo me hacía la víctima.
Nada es fácil, pero todo es simple.
Esto no va de estar motivado. Eso dura lo mismo que un helado al sol. Va de tener un plan y cumplirlo, pase lo que pase. Va de tomar acción, aunque estés cansado, sin ganas o con el mundo cayéndose a pedazos.
¿Quieres conseguir algo este año? Haz esto:
1. Define tu plan.
2. Haz algo cada día para acercarte a tu objetivo.
3. Ignora cómo te sientes y cumple con lo que te toca.
Y, lo mejor de todo: funciona. Aunque te cueste. Aunque sea incómodo. Si lo haces, te prometo que vas a lograr lo que quieras.
Ah, y un último consejo: ríete de ti mismo por el camino. Porque sí, esto es jodido, pero no tiene por qué ser amargante. Dibújate como un guerrero épico cada vez que cumples con el plan, aunque sea a duras penas. O imagínate explicándole a tu “yo del futuro” cómo venciste a la pereza con un lápiz en la mano.
¿Qué, lo vas a hacer o vas a seguir esperando la motivación mágica?
Y ojo, que esto no acaba aquí.
En el próximo post te voy a contar algo más personal. Porque, como te dije antes, los últimos días han sido duros. De esos en los que la vida te da un par de bofetadas para recordarte quién manda.
Te explicaré cuáles han sido los motivos de ese bajón y, lo más importante, cómo los he superado. Porque la clave no está en evitar los días malos (esos vienen sin que los invites), sino en aprender a levantarte cuando caes.
Así que si te interesa saber cómo darle la vuelta a los momentos difíciles, nos leemos en el próximo post.
Porque, amigo, lo difícil no es tener un bajón. Lo difícil es no quedarse ahí.
Y por último…en breve nuestra formación online .
Infórmate en [email protected] con la palabra aguacate