El resurgir del fenix

Creían que me habían apagado, pero estaba recogiendo leña.

EL RESURGIR DEL FÉNIX

En los tres últimos posts de mi newsletter os he hablado de mi nuevo sistema para trabajar el tatuaje.

Más espiritual, más profundo… y menos cómico.

Y ahora empieza el Proyecto FÉNIX.

Sí, uno de los diseños más tatuados del mundo.

Un símbolo que siempre quise grabarme en la piel, pero que nunca hice.

Y, sinceramente, creo que ya no lo haré.

Porque ahora no necesito tatuarlo.

Lo estoy viviendo.

Hace justo un año, la DANA arrasó con muchas cosas.

Entre ellas, mis redes sociales.

Todo empezó con un vídeo.

Un desahogo desde Berlín.

La impotencia de ver cómo el agua se llevaba lo que habíamos construido en Valencia.

Ese vídeo se hizo viral… y al mismo tiempo enterró mi visibilidad en TikTok e Instagram.

Al algoritmo no le gustó lo que dije.

Y por si fuera poco, ese vídeo (y otro anterior) me trajeron una inspección de Hacienda y un aviso real —no de película—:

“Ojito con lo que publicas. Te vigilamos.”

Ha sido un año intenso.

Y, a pesar de todo, lo he disfrutado como nunca.

He crecido más a nivel personal, profesional y empresarial en estos 12 meses que en los cinco años anteriores.

Mientras algunos pensaban que me habían apagado, yo estaba construyendo fuego.

Mr. Algoritmo y compañía creerán que acabaron conmigo.

Pero desde hoy —y durante los próximos 12 meses—

voy a demostrarles lo equivocados que estaban.

Todo lo que he creado a la sombra de Internet…

pronto será visible.

Y muchos de vosotros habéis formado parte de ello.

Gracias a Andrés, Mimi, María, Álex

y a todos los que formáis parte de mi círculo ( perseverance circle ), mi core

 ( el core ), mi familia.

Hoy empieza el proyecto.

Hoy empieza el resurgir del Fénix.

Os quiero.

—Jorge