El error más común

El error más común al hablar con un cliente (y cómo evitarlo)

Hola,

Hoy no voy a endulzar nada, voy directo al grano.  
Te voy a regalar algo que puede cambiar tu manera de conseguir clientes (o al menos, hacer que no te ignoren a la primera).  

Sí, has leído bien: te lo voy a regalar.  

Es algo tan simple, pero tan poderoso, que no todos lo valorarán. Algunos lo dejarán pasar. Otros, los que saben lo que hacen, lo aprovecharán al máximo.  

Se trata de una plantilla. Pero no cualquier plantilla.  

Es una guía para que sepas exactamente cómo hablar con un cliente que quiera tatuarse contigo.  
Cómo captar su atención, cómo hacer que se interese, y cómo cerrar esa conversación con un rotundo: “¡Sí, quiero tatuarme contigo!”.  

¿Lo mejor? Puedes usarlo de mil formas:  
- Como un mensaje directo a ese cliente que dudas en abordar.  
- Como un post en tus redes sociales.  
- Como un anuncio para promocionar ofertas irresistibles.  

Si hasta ahora te ha costado convencer, conectar o incluso captar la atención de la gente… esto puede ser el giro que estabas buscando.  

Y sí, funciona. Solo tienes que leerlo, adaptarlo y probarlo.  

Porque si no sabes cómo hablar con un cliente, no esperes que venga corriendo a tu estudio. Así de simple.  

Aquí viene la 1a:

Asúmelo, te lo mereces.

¿Cuánto tiempo llevas soñando con ese tatuaje?
Quizá desde que viste aquella imagen en internet.
O tal vez es algo más personal, algo que llevas dentro y que no te has atrevido a sacar a la luz.

Pero siempre hay un "después lo hago".
Un "ahora no es el momento".
Un "¿y si no me queda bien?".

Déjame decirte algo:
El mejor momento para hacerlo fue ayer.
El segundo mejor momento es hoy.

Porque los tatuajes no son solo tinta.
Son la historia que decides contar, la que llevas contigo siempre.
Son un recordatorio de lo que eres y, a veces, de lo que has superado.

Y si necesitas una señal, esta es la señal.

Aquí, en mi estudio en ( donde estéis ), no hacemos tatuajes perfectos.
Hacemos tatuajes que son tuyos. Únicos. Reales.
Porque lo último que quiero es que lleves algo que no te representa.

¿Todavía tienes dudas? Normal.
Pero si sigues leyendo esto, es porque algo dentro de ti dice que ya va siendo hora.

Y, oye, si lo haces, hazlo bien.
Escribe, cuéntame tu idea, y hagámoslo juntos.
Es tu historia. Es tu piel. Y sí, te lo mereces.

Haz clic aquí para pedirme cita.
(Eso sí, no tardes mucho: las plazas vuelan. Literalmente.)

Esta sería las más genérica , pero y si te llega el tipico de…. Que vale una manga entera, mi amigo lo hace por 20 €……..

Que se prepare,

"Esto no es para todo el mundo"

Si estás buscando que alguien te tatúe una manga completa por el precio de un paquete de pipas, tengo dos noticias para ti:
Primera, no soy yo esa persona.
Segunda, te estás equivocando de lleno.

Ese “amigo” que tatúa en su garaje, con la luz parpadeando y un equipo que parece sacado de un bazar, no te está haciendo un favor al cobrarte barato. Te está vendiendo algo que llevarás en tu piel para siempre. ¿Sabes cuánto dura el arrepentimiento de un tatuaje mal hecho? Toda la vida… o hasta que pagues el triple en láser o cover-ups para arreglar el desastre.

Aquí, las cosas se hacen bien o no se hacen. Cada diseño que sale de este estudio tiene horas de dedicación, experiencia, y algo que tu vecino cutre no puede ofrecerte: la tranquilidad de que cuando te mires al espejo en diez años, no vas a querer esconder el brazo.

Así que si lo que quieres es regatear, te recomiendo que lo hagas en el mercadillo. Pero si quieres un tatuaje que te represente, que sea arte de verdad y que esté hecho con la profesionalidad que merece tu piel, entonces hablamos.

Aquí no vendo barato. Vendo calidad. ¿La quieres o no?

Y otra más muy típica, eso de…hay quiero algo, pero no sé lo que quiero , algo finito pero elegante, pero tampoco sé dónde…..

Redobles de tambor

"Esto no es un menú del día"

A ver, si no sabes lo que quieres, ni dónde lo quieres, ni siquiera si lo quieres… déjame decirte algo: esto no es como elegir qué pedir en un restaurante. Aquí no hay “sorpresa del chef” ni un plato combinado que encaje con “que se vea, pero que no se vea, pero que yo lo vea”.

Un tatuaje no es un accesorio que te quitas y pones según el outfit del día. Es algo que llevas contigo siempre, así que mejor no lo elijas como quien escoge un bolso en rebajas.

Yo te ayudo a transformar una idea en arte, no a inventar algo de cero mientras tú dudas entre “lo hago o no lo hago”. Piensa en esto: si no tienes claro qué quieres, tal vez no sea el momento. Porque una vez esté en tu piel, no hay “control+Z”.

Así que aquí va mi consejo de tatuador y terapeuta gratis: tómate tu tiempo, decide bien, y cuando vuelvas, que sea con una idea clara. Porque tatuarte es para toda la vida, pero el “no sé” debería durar solo un ratito.

¡Ah, y no te preocupes! Te espero por aquí cuando decidas que quieres algo con sentido, no solo algo porque sí. Aquí, el arte va primero.

Y hasta hoy.